Mérida
26 de enero de 2015.
Practica número 7.
Educar en la igualdad y el
respecto es educar contra la violencia.- Benjamín Franklin
Quiero
comenzar con esta frase, porque en los últimos tiempos en nuestra sociedad, se
han olvidado esas dos palabras fundamentales: la igualdad y el respeto. Es
desde temprana edad donde los maestros y padres debemos reforzar, esta
educación, para vivir en una sociedad de paz e igualdad.
Primera parte:
Recibimiento
de los alumnos en el patio central, una profesora encargada del acto cívico, dirigió
unas breves palabras a los niños sobre el respeto para con ellos mismos y toda la comunidad
escolar. Entonación del himno nacional. Ordenó el retiro de los niños del patio
central a sus aulas de clase.
La
profesora y los niños del aula donde asisto se mostraron muy contentos al verme
en el aula de clase, debido que usualmente
asito los días miércoles y hoy era lunes por lo que me dijeron “siempre serás
bienvenida”.
Cada
niño ingresó al aula y se ubicaron en sus respectivos lugares, la profesora les
indicó que podían proceder a desayunar. Los niños sacaron su desayuno y
comenzaron a compartir sus anécdotas del fin de semana. Me agradó como ellos
comparten sus anécdotas, con el compañero de al lado, y entablamos una pequeña
reunión mientras desayunaban.
Una
vez finalizada la hora del desayuno, la profesora les pidió que sacaran su
cuaderno de doble línea, escribieran la fecha. Luego la profesora les escribió
en el pizarrón los posibles nombres para el proyecto de aprendizaje de este
lapso. Ella les preguntó que cuál era el tema y todos respondieron conociendo
los deportes. Les explicó que tenían que seleccionar un nombre que lo harían
por votación.
Las
opciones eran:
a) Pequeños
triunfadores
b) Pequeñines
triunfadores
c) Pequeñitos
triunfadores.
La
profesora les preguntó que si recordaban, el test que la profesora Marie Claire
había realizado en la clase del jueves, y todos dijeron que si, entonces que
tomaran ese ejemplo, para seleccionar una sola opción.
Resultados
de la votación: opción a) 18
b) 8
c) 5
La
opción ganadora fue la opción a) “Pequeños triunfadores.” Todos estaban
contentos. Es interesante observar, como desde tan temprana edad, podemos
darles a los niños poder de decisión, enseñarles que pueden escoger y decidir qué
hacer para su aprendizaje.
Los
niños fueron al recreo.
Parte II
Al
regresar del recreo, la profesora les indicó lo siguiente: el primer grupo iría
a la biblioteca y procedió a nombrar los
niños y el segundo equipo estaría recibiendo la clase de música en el aula de
clase. La profesora se fue con el primer grupo a la biblioteca. Antes de irse
la profesora, me indico que por favor le ayudara a escribir en el cuaderno a
cada niño la A.P.H (Actividad Para el Hogar). La profesora me indicó que le
habían cambiado el nombre por orden del Ministerio del Poder Popular para la Educación
y que ahora se llamaría “Reforzamiento”
Yo me quedé en el aula con la profesora de
música. Era la primera vez que la veía.
La
profesora de música comenzó a escribir la letra de una canción en el pizarrón. Mientras
ella copiaba, yo estaba escribiendo el reforzamiento indicado por la profesora
en el cuaderno de cada niño, mientras ellos copiaban la canción.
Observe que la clase de música no fue tan dinámica
como yo esperaba. Me tomé la libertad de preguntarle a un niño, que si las
clases de música siempre eran de ese estilo, a lo que me respondió que sí. En
primer lugar pensé, que fácil era para la profesora solo copiar la canción en
el pizarrón y luego tararearla dos o tres veces, en eso se le fue la clase. Le
pregunté a un niño que si le gustaba las clases de música, me dijo que a veces.
Allí
es donde me pregunto, que pensará ese tipo de profesores que hoy en día tenemos
en nuestras clases de música, en este caso refiriéndome a esta profesora. Me
trasladé a muchos años atrás cuando yo veía clase de música, recordé a mi linda
profesora, que tenían tantas estrategias para que sus alumnos se inclinaran a
la música, llevaba su cuatro, maracas, guitarra, entre otros instrumentos y nos
permitía tocarlos. Aunque no tocáramos melodías
de Mozart por decir algo, sino una
melodías ruidosas, el aprendizaje
llegaba a nosotros, pues teníamos el contacto con los instrumentos, muchas
veces hasta componíamos canciones.
Ese
estilo de profesores activos, innovadores, motivadores son los que realmente añoramos para nuestras
aulas de clase para nuestros niños. Debemos enseñarlos para hacer, aprender, y
sentir. Que cada uno de esos niños obtengan
un aprendizaje destacando sus habilidades y destrezas en este caso para la
música.
Una
vez terminada la hora de música el grupo de la biblioteca regreso al aula. La
profesora les indicó que trabajarían con el área de matemática, con el
reforzamiento de la escritura de números en este caso del 20 al 40.
La
profesora comenzó con un repaso de los números, todos los niños contaron del 0
al 40. Ella les retroalimento que se los saben, pero que están muy débiles en la
escritura, por eso debían copiarlos en su cuaderno para aprenderlos a escribir.
Mi
desempeño en esta actividad, fue la de asistir a un grupo de niños asignados
por la profesora, para facilitar la escritura de esos números a ese grupo. Esta
jornada como las anteriores han sido muy interesantes. He podido observar como
cada niño actúa, aprende fuera de su hogar, que la escuela es su segundo hogar,
que al momento de asistir a ella, algunos necesitan más apoyo. Otros pareciera que en casa tiene una familia
que colaboran con el aprendizaje y reforzamiento de contenidos, por
consiguiente esos niños necesitan de profesores colaboradores, facilitadores,
motivadores, constructivistas que sean el andamio para lograr los objetivos y
convertirse en niños críticos, capaces de hacer, pensar, convivir, valorar y
participar.
Finalizo la jornada escolar
Marie claire
copiando el reforzamiento. |
Canción copiada por la profesora de música |
Fin de la jornada
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